De las diferentes formas de aproximarse al mundo
Alguna vez te has encontrado con una persona con la cual, a pesar de todo, no logras congeniar? Que cada vez que conoces su opinión sobre algún tema, sus posiciones parecen venir de planetas distintos? Si la respuesta es positiva, puede que hayas conocido a una persona de otra especie.
En su charla Patafísica. Iluminar la ciencia con la oscuridad de la duda, Briggite LG Batipste habla de cuatro formas de entender el mundo. La primera es la científica, en la cual el trabajo del científico no es crear nada como tal, sino explicar y entender el mundo. Es una actividad muy simple, lo que no significa sencilla. Por más complejo y bello que sea un modelo matemático, si no concuerda con la realidad no sirve de nada, pues es el mundo el que tiene la palabra final.
En su libro El concepto de Derecho, el teórico H.L.A. Hart habla de dos formas de estudiar un sistema social. Una, es la mirada externa, que es la del observador separado de lo observado, que es neutral y nota patrones generales de movimientos. Otra, es la mirada interna, en donde un miembro y parte del sistema lo estudia desde adentro hacia afuera. Entonces, al estudiar el cumplimiento de las normas en la sociedad colombiana, la mirada externa verá patrones de desobediencia y obediencia, lo cual se puede explicar estadísticamente y meramente como hechos, y la mirada interna notará las disposiciones de las personas, sus motivos para actuar de una forma determinada, y todo lo que explica lo que se vió externamente.
Si se ve, el pensamiento científico y el patafísico, que también puede ser llamado artístico, se oponen de muchas maneras. El científico siempre busca ser objetivo, y que su subjetividad no interfiera de ninguna manera en la recaudación de datos. Su pensamiento es tierra, pues está muy cerca al mundo físico y teme ser aire como es el artista, al cual no le importa el mundo físico sino las impresiones que éste causan en él. No le importa explicar tanto como plasmar.
En el taoísmo, el ego se compone de nuestros pensamientos, sentimientos, opiniones, reacciones, historia, ideas, en fin, todo aquello que compone nuestra individualidad. Según esta religión, tomar decisiones con base en el ego niega la existencia de algo más grande que es el Todo, el cual se comunica a través de la intuición. Esta posición religiosa es parecida a la del catolicismo, en donde no debemos actuar con base a nuestros razonamientos, sino a lo que dicte "el señor". Por ejemplo, según los Testigos de Jehová, no se debe competir en deportes, pues esto trae vanidad y, aunque no use esta palabra, inflación del ego, que se ve como algo contrario a Dios.
Por lo anterior y porque las religiones son formas de cohesión social, la religión siempre ha perseguido la individualidad, la exaltación de la belleza del cuerpo, la inteligencia, el goce sensual: todas aquellas experiencias subjetivas que nos hacen únicos y diferenciables del grupo.
Frente a esto, el arte es el más poderoso antídoto. Utiliza la belleza y la imaginación, dos expresiones de la individualidad, para plasmar impresiones propias de una forma que impacte al otro, sin importarle mucho las nociones de Dios o de un Todo por el cual no deba cultivarse a sí mismo.
Si nuestra capacidad para acallar el ego es la forma de volverse un heraldo o traductor de ideas que provienen de la conciencia colectiva, se entiende porqué el científico es una persona de ideas y teorías, mientras que el artista es una persona de impresiones estéticas.
Al final, entonces, es un tema de confianza. En una situación de la vida, quién decide? Yo o el Todo? Cuál es el criterio que debemos tener para navegar en la vida, uno interno o uno externo?
Afortunadamente, la nueva religión no encuentra contradicciones. Se reconoce que tanto nuestra inteligencia, imaginación, como nuestro amor, odio, rabia y sensualidad, hacen parte del Todo. Cómo podría existir el Todo si no comprende al Ego? No sería el todo. Entonces, no se trata de ser científico o artístico, sino de entender que entre más fuerte sea el individuo, más fuerte será el grupo o el Todo, pues no se entienden como separados, sino en la misma misión: la gloria de toda la vida.
